Tini Stoessel, la justiciera que arrasa con su historia

La artista argentina, de proyección internacional, acaba de lanzar su último álbum llamado “Un mechón de pelo” que rápidamente pasó a estar en boca de todos pero no justamente por su calidad artística, porque sus temas se hayan vuelto “hits”, porque haya roto nuevos récords o porque haya contado con una colaboración muy destacada sino porque, en una de sus letras, apunta con munición pesada contra el mismísimo Marcelo Tinelli tratándolo de “judas”.

El pase de factura se remonta al año 2008 en el que Alejandro Stoessel era uno de los productores de “Ideas del Sur” (la productora de Marcelo en ese entonces), y el creador de “Patito Feo”, una de las ficciones infantiles más exitosas realizada en la Argentina. Todo iba de maravilla hasta que en ese año comienza un problema por los derechos de autor del “merchandising” de la tira, Stoessel padre es desvinculado de la productora y luego descubre que ya habían patentado todo lo relacionado a su creación, pero sin incluir su nombre.

Lo cierto es que muchos rumores existieron en torno al tema, pero se dieron pocas declaraciones a la prensa puesto que, enfrentarse a uno de los empresarios más poderosos de la TV del país, implicaba un inevitable destierro aboral como represalia. Esta especie de “castigo” oscureció la carrera profesional de Alejandro.

Pero todo esto también salpicó a una incipiente estrella que, en ese momento, era una pequeña niña llamada Martina Stoessel quien ya había tenido unas pequeñas participaciones en “Patito” y desde ahí no se supo más nada de ella hasta que “el destino la pintó de violeta”, según versa la letra de la controversial canción llamada “Ángel” que acaba de estrenar. Con el respaldo de Disney (un mundo en el que Tinelli no tiene injerencia), “tini” vuelve a la pantalla llegando a toda Latinoamérica y al mundo, pero esta vez en un rol protagónico.

Hoy, ya convertida en una exitosa mujer y artista reconocida mundialmente, alza la voz en una de sus canciones a modo de catarsis, contando aquella historia que le tocó vivir de pequeña junto a su “ángel” que fue traicionado por quien era como su “hermano” pero lo terminó “empujando de un puente”. Millones de personas conocieron la verdad de la chica de la pegadiza triple “T” (Tini, Tini, Tini), otras que pasaron por situaciones similares (como la autora de los libretos de Patito feo), suman sus voces a esta cruzada y quien tuvo que llamarse al silencio esta vez fue el villano, el “hermano”, “judas”.