Explican los alcances que tendría el restablecimiento del Impuesto a las Ganancias

La nueva Ley Bases que enviará el Gobierno al Congreso tendrá incorporada la aplicación del nuevo Impuesto a las Ganancias y, luego de confirmarse el mínimo no imponible en $ 1.800.000, se podrá anticipar cuánto pagará cada trabajador que supere esa cifra.

El impuesto empezará a pagarse para los solteros a partir de $ 1.800.000 y el porcentaje de pago mínimo será del 5%. Para los casados que tengan dos hijos, el impuesto empezará a correr a partir de los $ 2.400.000 y el porcentaje base también será el mismo. El Gobierno busca reinstalar este tributo que se sacó durante la última campaña presidencial para poder mantener el superávit. Ante los reclamos de las distintas provincias por las cajas y la coparticipación, desde el Gobierno de Javier Milei plantean que la reinstalación de este tributo les dará alivio tanto a los gobernadores como a nación.

En diálogo con el programa La Otra Mirada de FM Espacios, el contador Mario Campelo, se refirió a este tema y explicó que en la actualidad “tenemos una zona gris. Tenemos la ley del impuesto cedular que se creó el año pasado por el Congreso de la Nación por iniciativa de un decreto del exministro de economía Sergio Massa, que no está reglamentada. Es decir, no tenemos con precisión cuáles son los pasos a seguir, uno puede interpretar de una manera lógica la ley y llegar a hacer el trabajo pertinente, pero salta la duda de directores de administración, de distintos organismos de la administración pública que no tienen información precisa para hacer las retenciones de aquellos empleados y jubilados que, por sus ingresos les corresponde practicar”.

En ese sentido consideró que el cambio al impuesto a las ganancias “por lo menos aplica un poco de claridad a esta falta de reglamentación del gobierno del presidente Milei. Este año arrancamos explicando en la Universidad que existe un impuesto cedular para los altos ingresos, que era una parte de la cuarta categoría, y ahora con esta nueva introducción, con la ley de base, vuelve a eliminar este impuesto cedular y vuelve el histórico impuesto a las ganancias de las cuartas categorías para todo el personal en dependencia”.

Diferencias entre impuestos

Al ser consultado sobre la diferencia que existe entre el impuesto cedular y el de ganancias, Campelo detalló que “la ley que se aprobó el año pasado hablaba que aquellos que tenían el mínimo imponible de 15 salarios mínimos, estaban afectados por el impuesto cedular. O sea, más o menos estamos hablando de un sueldo bruto de 2.300.000 pesos. Todo el conjunto de trabajadores en relación de dependencia: empleado bancario, empleados camioneros, todo lo que no sean administración pública, desde secretario de estado para abajo, todo eso era hasta hoy, impuesto cedular. La ley dice que desde el secretario de estado para arriba forman parte del impuesto a la ganancia cuarta categoría y en el ámbito privado: los gerentes, presidentes, directorio, esos sí siguen estando en cuarta categoría. Ahí se armó una disyuntiva porque no teníamos la reglamentación. Hubo también mucha confusión con la escala para aplicar las deducciones”.

Durante la entrevista, Campelo señaló además que “con esta modificación que hace otra vez el Poder Ejecutivo actual, hace que el director de una escuela en el Oeste que cobra zona, que el director del hospital de Lomitas o de Ibarreta, que el camionero viajando con cinco años de antigüedad o el empleado del Banco Formosa o Nación, que históricamente fueron de la cuarta categoría y que sabían muy bien a partir de qué escala le empezaron a descontar, todo ese universo hoy, al 15 de abril, no están recibiendo ningún tipo de descuento del impuesto a las ganancias”.

Esto implica que “están teniendo una mejora de bolsillo real en sus ingresos. No les están descontando nada del impuesto a la ganancia. Es que todo este universo ahora tributa bajo el impuesto cedular, que entró en vigencia este 1° de enero del 2024 pero que se va a eliminar y van a formar parte otra vez del histórico impuesto a las ganancias”.

Monotributistas

En relación a los monotributistas, el contador explicó que hay una modificación importante que se aplica con la Ley Bases. “El monotributo tiene, históricamente, una diferencia entre prestación de servicios y venta de cosas muebles. Quien hace venta de cosas muebles puede ejercer tres categorías más y facturar casi cerca de 5 millones de pesos más que aquel que presta servicios. Es decir, el quiosquero que vende un alfajor, una gaseosa, puede facturar tres categorías más que nosotros que prestamos servicios. Eso fue así históricamente desde que se creó la ley y con esta modificación que está en la Ley de Base, eso se elimina y se va a equiparar, van a aumentar tres categorías más todo aquellos que prestamos servicios, o sea, que vamos a equipararnos a la venta de cosas muebles y tener una facturación equivalente. La mala noticia de estas modificaciones es que se viene una escala aún más cara de la que está ahora; mucho más cara”.

En ese sentido, el contador Campello recordó que “hasta el 31 de diciembre la cuota inicial del monotributo andaba más o menos en los 3 mil pesos; a partir del 1° de enero la cuota inicial del monotributo pasó a 13 mil pesos. Y estamos hablando de un aumento aún mayor, una vez que se aprueba esta ley. Se viene el aumento de la inicial a la máxima de las categorías, y luego, otro aumento más. Eso quiere decir que el aumento que hubo el 1° de enero no es el único y ya con este cambio en la normativa del monotributo, se vienen más subas”.

Como consecuencia, reconoció que lamentablemente “debo admitir que hemos tenido muchas bajas entre nuestros clientes monotributistas que prestaban servicio: chapistas, herreros, electricistas, que decían: quiero ser monotributista para ir pensando en mi aporte jubilatorio, para tener mi tarjeta de crédito, pero con lo que está pasando hay bajas de monotributistas y surge el temor que el Estado salga a cazar en un zoológico como siempre porque ¿cuánto más puede aumentar la cuota a un monotributista?”, se preguntó finalmente.