miércoles 24 de abril de 2024

Lote111: Una familia no habitaba su módulo y lo reasignaron a otra que sí lo necesitaba

sábado 30 de noviembre de 2019

Los módulos habitacionales construidos en esta ciudad, en el marco de la política de justicia social que lleva adelante el gobernador Gildo Insfrán, tiene como finalidad garantizar un techo a familias que viven en situación de vulnerabilidad. Su comercialización constituye un delito pero, sobre todo, un acto de falta de solidaridad hacia quienes sí verdaderamente necesitan un techo digno.

Por ello, todo aquel adjudicatario que no habite el módulo otorgado oportunamente en base a una lista de prioridad, debe devolverlo para que una familia que sí se encuentra viviendo en condiciones de riesgo pueda acceder al beneficio de contar con una casa segura.

Cabe recordar que la mujer que vivia en el lugar realizó un video y lo envio a este medio pidiendo que no le quiten el módulo, manifestando que tiene cuatro hijos menores de edad, y que efectivamente habitaba en el módulo pero que según la misma salia desde horas tempranas y retornaba entrada la noche. En los últimos días, el Ministerio de la Comunidad dispuso la desafectación. En el 2018, esta persona fue denunciada por los propios vecinos en dos oportunidades por no habitar el lugar e, incluso, manifiestas intenciones de venderlo. En octubre de este año, la familia firmó un acta de compromiso de ocupación, el cual un mes y medio después no fue cumplido según constató el equipo técnico social del programa, como así efectivos de la Comisaría del Lote 111.

Eventualmente se veían personas durante el día, pero por las noches nadie dormía en el módulo. Incluso, en una oportunidad los vecinos denunciaron a la Policía que ladrones ingresaron a la casa, situación que no fue advertida por la adjudicataria hasta que se le informó desde el Ministerio. Las autoridades comprobaron que el módulo no era habitado y presentaba un preocupante estado de abandono (ratas, cucarachas, y hasta un hormiguero fueron encontrados en su interior), lo que hacía peligrar la integridad sanitaria de los vecinos de los alrededores.

Otra familia formoseña que requería en carácter de urgente un techo, fue reubicada en ese módulo durante la mañana del viernes. Se trata de una familia conformada por 9 miembros que vivían en condiciones de extrema indefensión desde hace cuatro meses en una precaria casilla de chapa de cartón en el barrio Sagrado Corazón. Sin agua corriente, sin baño, en un terreno prestado vivían Antonia, su pareja que tiene una colostomía, sus hijos y una nietita. Una de las niñas, de 4 años, tiene una tumoración de parótidas, y actualmente aguardan los resultados de la biopsia para iniciar su tratamiento.

Las condiciones en que se encontraba esta familia exigían un cambio urgente, por lo que ante las sucesivas denuncias y la correspondiente verificación de que el módulo en cuestión no estaba habitado, el Ministerio de la Comunidad procedió a su reasignación.

Un equipo social del Ministerio dio la buena noticia a la familia del Sagrado Corazón y acompañó su traslado a lo que será a partir de ahora su hogar, un techo digno y seguro para sus hijos, con todos los servicios básicos. Además, se les proveyó de camas, colchones y chapas para una futura ampliación.

El Programa de Módulos Habitacionales tiene un carácter integral, y está orientado al mejoramiento del entorno y la calidad de vida de las familias de menores recursos que habitan sectores deprimidos de la ciudad, posibilitando la inclusión social de los mismos.

Hay un criterio de prioridades establecido para que los adjudicados puedan tener su módulo, es decir, que lo tenga quien realmente lo necesita. Entre los criterios que se tienen en cuenta, está la situación de vulnerabilidad social, es decir, indigentes o pobres, hogares donde no hay un ingreso fijo alto; familias numerosas que viven en condiciones de hacinamiento e integrantes con problemas de salud.

En la ciudad de Formosa ya se llevan entregados más de 6 mil módulos en distintos sectores de la ciudad. El programa no tiene cupo, está pensado como una solución para aquellas familias que lo necesiten y se enmarca en la política habitacional del Gobierno provincial.